martes, 11 de abril de 2023

Edad de los Metales

¿Qué es la Edad de los Metales?

La historia de la humanidad ha quedado dividida en dos partes fundamentales debido a la invención de la escritura: la prehistoria (antes de que se inventase) y la historia (después de que se inventase). La Edad de los Metales es el segundo gran período de la prehistoria que aconteció una vez finalizada la Edad de Piedra, alrededor del año 5.000 a. C. (teniendo en cuenta que se trata de una cifra aproximada).

Al igual que su antecesora, la Edad de los Metales se divide en tres períodos, solo que estos reciben el nombre del metal que más se empleaba en cada momento: Edad de Cobre, Edad de Bronce y Edad de Hierro. Este último da paso a la Edad Antigua alrededor del año 550 a. C.

En el eje cronológico aproximado que se presenta a continuación, se puede apreciar mucho mejor y gráficamente esta información.



Así se puede decir que la Edad de los Metales duró 5.000 años escasos, una cantidad muy inferior a los millones de años que duró la Edad de Piedra. No obstante, y como veremos en los siguientes apartados, fueron unos años con bastantes avances y continuos descubrimientos.
 


¿Cuál es el origen de la Edad de los Metales?

Al final del Neolítico, los seres humanos eran sedentarios y su economía estaba basada en la agricultura y la ganadería. A la hora de desarrollar estas y otras actividades empleaban la piedra como principal material para fabricar los utensilios y demás objetos que usaban en su día a día. Esto fue así hasta que vieron que el cobre era un material maleable al golpearlo. Sin embargo, y es aquí donde comienza la Edad del Cobre y con ella la Edad de los Metales, descubrieron que al fundirlo era aún más moldeable y que al enfriarse mantenía la forma dada. 


¿Cuáles son las características principales de la Edad de los Metales?

Es importante comenzar señalando que, al igual que sucede con otras etapas de la prehistoria y la historia, la Edad de los Metales no se vivió de la misma forma en los distintos continentes. Esto quiere decir que las características que se presentan en los próximos párrafos pueden diferir en algunas cosas dependiendo del lugar concreto del que se hable. En todo momento, se están mencionando generalidades para hacernos una idea de cómo era la vida en aquellos tiempos tan antiguos.

Así pues, teniendo siempre presente lo expuesto en el párrafo anterior, citaremos las características más generales de esta parte de la prehistoria:


    La metalurgia:

Primero con la fundición de metales como el cobre, la plata y el oro y, después, con la mezcla de dos o más elementos como el estaño con el cobre para obtener bronce.

Con estos materiales creaban utensilios para la agricultura, armas, joyas y decoraciones de distintos elementos.

El trabajo con los metales se convirtió en un oficio que poco a poco se fue extendiendo por el mundo.


    Aumentó y mejoró la agricultura:

Los avances en agricultura se dieron gracias a los nuevos tipos de herramientas y a técnicas más innovadoras como los canales de riego que se empezaron a utilizar y que permitían la llegada del agua a los huertos de una forma más efectiva y abundante.

También cabe señalar que cultivaban algunas plantas con fines no alimenticios, por ejemplo: para crear telas.

    Tiempo de inventos:

La metalurgia trajo consigo la invención del horno de piedra para fundir los metales. Aunque también se empleaba para calentar comida y hacer vasijas.

Se empezaron a crear armaduras, escudos y armas más especializadas con fines bélicos.

La rueda, que data del final del Neolítico, fue desarrollándose desde ser una pieza para moler cereales a utilizarse como torno en cerámica hasta llegar a su principal función, incluso hoy en día, facilitar los transportes. En este caso la piedra típica del Neolítico dio paso a la madera como material para fabricarlas por ser más ligero y fácil de modelar.

Se empezaron a utilizar embarcaciones creadas con troncos y propulsadas por el viento gracias a una tela grande a modo de vela. Este medio de transporte les permitía llevar objetos pesados de un lugar a otro con más facilidad.

Por su utilidad en la vida cotidiana, también destacan la fabricación de tela, para lo cual cultivaban algunas plantas o traían otras de fuera, la creación de cestos que ya se empezó en el Neolítico (con mimbre, esparto, caña o tiras de madera) para contener y transportar cosas y el uso del calendario solar para medir el tiempo a través de las horas de luz

    Las primeras ciudades organizadas:

El sedentarismo, los asentamientos, la edificación de edificios, la organización de la sociedad y la especialización de los oficios supuso el desarrollo de las primeras comunidades de personas que daría lugar a lo que se conoce como ciudades.


    El comercio y la navegación:

La agricultura, la ganadería y la caza tuvieron un gran peso en el aspecto económico. Sin embargo, la minería, la metalurgia y la artesanía fueron ganando terreno. Los trueques de excedentes del Neolítico se desarrollaron gracias a los metales hasta convertirse en un verdadero comercio. Algo que se consolidó con el desarrollo del transporte marítimo (los barcos de vela) y los inicios de las rutas marítimas.

    Organizaciones sociales:

Las diferencias que se empezaron a ver al final de la etapa anterior se hacen más evidentes, de forma que algunos sectores comenzaron a ganar poder con respecto al resto: los jefes y sacerdotes en primer lugar y los guerreros a continuación.

En el lado contrario, sin privilegios ni poder alguno, se encontraban los panaderos, las hilanderas, los agricultores y los ganaderos. Aquellos que trabajaban los metales se posicionaban en otro lugar por ser muy valorados, pero no al nivel de los que tenían ciertos privilegios.

    Culto a los dioses:

Como en las etapas anteriores, el arte y las creencias estaban muy relacionados. Se ha llegado a la conclusión de que llevaban a cabo rituales al aire libre y ofrendas de objetos (principalmente, armas). También se cree que veneraban dioses y que cambiaron la manera de llevar a cabo los enterramientos: en esta etapa, era más extendida la práctica de la cremación o incineración de los cuerpos antes de enterrar los restos.

¿Cuáles son las etapas de la Edad de los Metales?

Como ya hemos anunciado, la Edad de los Metales, en general, se puede dividir en tres etapas. Esto se puede apreciar en el siguiente esquema de la prehistoria:

    La Edad de Cobre: es la primera etapa y, aproximadamente, se puede situar alrededor del año 5.000 a. C. hasta el año 3.000 a. C. En esta etapa, como es de esperar, lo más destacado es el surgimiento de la metalurgia: el fundir los metales para hacerlos más maleables. El cobre, el oro y la plata fueron los primeros metales en ser fundidos.
    La Edad de Bronce: aproximadamente entre los años 3.000 a. C y 1.500 a. C. El paso entre la etapa anterior y esta es la aleación de los metales, es decir, mezclar varios para dar lugar a uno nuevo. Esto comenzó con la aleación de cobre y estaño para dar lugar al bronce que resultó ser un material más resistente.
    La Edad de Hierro: se puede datar aproximadamente también entre el año 1.500 a. C. y el 550 a.C. En esta etapa destaca el uso del hierro como material principal por ser aún más resistente que los anteriores y a pesar de que, hasta este momento, se le consideraba un metal precioso debido a su brillo. Además, como se expone en el apartado siguiente, empezaron a forjarse los cimientos para el cambio de edad.

¿Qué marca el fin de la Edad de los Metales y el comienzo de la Edad Antigua?

En algunas regiones empezaron a darse los primeros atisbos de escritura y en otras aumentaron los enfrentamientos bélicos, dos hechos con un peso sustancial como para dar lugar a un cambio de Edad e incluso de concepción de la historia: con la escritura se puso fin a la prehistoria y comenzó el camino de la historia.

A continuación, encontrarás una ficha de Apuntes donde se recoge la información más importante del texto y unos enlaces a otros textos que pueden resultarte igual de interesantes para conocer mejor la prehistoria.

Actividades:

Desarrollar en el cuaderno las siguientes actividades: